¿Cómo optimizar el uso de mi secadora?
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¿Cómo optimizar el uso de mi secadora?

Nuestros consejos para ganar en eficacia

 

No todo el mundo tiene la suerte de disponer de un jardín o una terraza donde dejar secar la ropa al sol y al viento. En la ciudad o en una vivienda pequeña, cuando no se quiere convertir la casa en una lavandería, la secadora es una solución práctica y probada.
Con nuestros consejos, podrás mejorar su eficacia y reducir el tiempo de secado.

El centrifugado

 

La secadora es un aparato eficaz, pero ¿por qué dejarle hacer todo el trabajo?
En lugar de introducir la ropa todavía mojada, conviene dejar que la lavadora realice un buen programa de centrifugado. Esto permite reducir a la mitad el tiempo de secado.
Además, la ropa se conservará mejor, ya que el único defecto de la secadora es que desgasta los tejidos por fricción, algo que no ocurre durante el centrifugado, incluso a alta velocidad.
También ayuda a que la ropa no salga arrugada.

 

Suavizante y detergente

 

Si tu secadora parece funcionar más despacio, si los ciclos se alargan o, peor aún, si la ropa sale manchada, lo más probable es que se deba a residuos de suavizante o detergente.
Reduce las dosis de ambos productos. Mejor aún: sustituye el suavizante por vinagre blanco, vertiendo medio vaso en el compartimento del suavizante en lugar del producto habitual. Es igual de eficaz, más económico y menos alergénico.

 

Manchas y olores

 

La ropa que se mete en la secadora debe estar perfectamente limpia.
Si quedan manchas, el calor de la secadora las quemará y las fijará más profundamente en el tejido. En algunos casos, también puede generar mal olor en el aparato y, por tanto, en el resto de la ropa. Por esa razón, nunca se debe meter ropa con mal olor en la secadora pensando que desaparecerá, ni siquiera con el programa de “aire frío”.

El lugar adecuado

 

Para funcionar correctamente, la secadora necesita hacer circular aire caliente para evaporar la humedad. Por ello, no debe colocarse en un lugar húmedo, ya que esto alargaría considerablemente el tiempo de secado. Debe instalarse en un espacio seco y bien ventilado.

 

¡Suelta la ropa!

 

Aunque sea tentador, no metas la ropa hecha una bola directamente en la secadora tras sacarla de la lavadora. Sacúdela un poco antes de colocarla en el tambor. Así, el secado será más rápido y evitarás que la ropa salga arrugad

 

Al final del ciclo

 

Una vez finalizado el ciclo de secado, según el tipo de tejido, la ropa puede quedar ligeramente húmeda. Para un resultado perfecto, sácala, muévela un poco a mano y espera unos minutos dejando la puerta abierta. Si vas a planchar la ropa, lo mejor es sacarla inmediatamente para aprovechar la humedad residual. Incluso puedes reducir el tiempo de secado para dejar la ropa más húmeda y facilitar el planchado.

 

¡Aspira!

 

Los filtros de la secadora deben limpiarse después de cada uso, ya que acumulan pelusa de los tejidos. El aspirador es muy útil para limpiar a fondo estos filtros, pero no olvides pasarlo también por la parte inferior del aparato. Hazlo al menos una vez cada dos usos, para evitar que las rejillas de ventilación se obstruyan.

Reducir el tiempo de secado

 

Para un secado más rápido y eficaz, coloca una toalla seca dentro del tambor junto con la ropa. Durante el ciclo, la toalla absorberá parte de la humedad, lo que permite ahorrar tiempo y proteger los tejidos. Además, supone un pequeño ahorro en la factura eléctrica.

 

Anti-bolitas

 

Cuando una prenda comienza a hacer bolitas, quitarlas a mano puede ser tedioso, y muchas veces se pegan a otras prendas. Un truco simple: coloca unas medias viejas enrolladas dentro del tambor. Atraerán y recogerán la mayoría de las bolitas y pelusas.

 

 

Buen olor
 

Si la ropa tiende a salir con mal olor, primero verifica que ninguna mancha se haya quemado. Luego, limpia el interior del aparato con una esponja húmeda y vinagre blanco. Recuerda dejar siempre la puerta abierta o entreabierta entre usos.

Para dejar un buen aroma en la ropa, añade 2 o 3 gotas de aceite esencial sobre la toalla que utilizas para absorber la humedad. Los aceites esenciales recomendados son: árbol de té, romero, ylang-ylang, limón, geranio, petitgrain bigarade o nardo.

Pelotas de tenis
 

Para evitar que la ropa salga plana o rígida, puedes colocar dos o tres pelotas de tenis en el tambor durante el ciclo. Se desaconseja el uso de bolas de goma dura, más adecuadas para la lavadora, ya que las pelotas de tenis son más silenciosas y ofrecen el mismo resultado.