¿Cómo optimizar el uso de mi aire acondicionado?
Tratamiento del aire

¿Cómo optimizar el uso de mi aire acondicionado?

 

Mantente fresco a bajo costo

 

El calor ha llegado y temes la factura de electricidad a fin de mes por culpa del aire acondicionado. No te preocupes, hemos preparado una guía con buenas prácticas para ayudarte a mantener tu hogar fresco y ahorrar energía.
Aprenderás a: identificar el tipo de aire acondicionado que tienes, calcular la potencia óptima para enfriar tu casa, reducir el costo de la factura eléctrica, comprender los niveles de ruido y mantener tu equipo en buen estado para un uso más eficiente

Tipos de aires acondicionados

 

Los aires acondicionados pueden ser fijos o portátiles.
Los modelos fijos requieren la instalación de una salida de ventilación para evacuar el aire caliente al exterior. En la misma categoría se encuentran los sistemas Split, compuestos por dos unidades: una interior (en la habitación a climatizar) y otra exterior, encargada de expulsar el aire caliente.
En ambos casos, la instalación es relativamente compleja y debe ser realizada por un profesional. Este tipo de instalación está recomendado para regiones donde el clima justifica un uso estacional del aire acondicionado.

Los sistemas Split reversibles también pueden funcionar como bomba de calor, proporcionando calefacción en invierno.

Para evitar las limitaciones de una instalación fija, se puede optar por un aire acondicionado portátil. Estos dispositivos son más económicos y resultan perfectos para refrescar un espacio de forma puntual durante una ola de calor, aunque no están pensados para un uso continuo durante todo el año.
Equipados con ruedas, pueden trasladarse fácilmente de una habitación a otra.

Aunque son portátiles, también necesitan evacuar el aire caliente y húmedo al exterior mediante un tubo que se coloca en una ventana o puerta entreabierta. Sin embargo, este sistema deja entrar el aire caliente del exterior, por lo que el balance ecológico de los aires portátiles es muy negativo.
Para reducir el impacto (y la factura eléctrica), es recomendable usar un kit de ventana, que ayuda a sellar la salida de aire. Puede ser un accesorio que se ajusta a una ventana entreabierta o que sustituye temporalmente un vidrio.

¿Qué potencia elegir?

 

La potencia (en vatios) del aire acondicionado debe elegirse según el tamaño de la habitación a enfriar.
Si el aparato no tiene suficiente potencia, funcionará más tiempo y con mayor frecuencia, lo que provocará un desgaste prematuro, más ruido y un aumento considerable de la factura eléctrica.

Con una altura de techo de 2,50 metros, se recomienda 1 kW por cada 10 m².
La mayoría de los aires acondicionados portátiles tienen una potencia de entre 2.000 y 3.500 vatios, ideal para habitaciones de 15 a 40 m².

 

Ahorrar energía

 

Los aires acondicionados, como los electrodomésticos, están clasificados en categorías energéticas (de A+++ a G) según su consumo eléctrico.
Esta información figura en la etiqueta energética obligatoria.
Se recomienda elegir un modelo de clase A o superior (A++ o A+++).

Si el aparato cuenta con modo eco o modo noche, es mejor utilizarlo.
En caso de ausencia prolongada (más de una hora), los aires acondicionados portátiles deben apagarse. No hay problema, ya que estos dispositivos enfrían el espacio rápidamente al encenderse, igual que los del coche.
Por el contrario, no se debe apagar una bomba de calor o un sistema Inverter, ya que su funcionamiento es diferente.

 

 

El ruido

 

Klimaanlagen erzeugen Geräusche durch ihre Ventilation. Die Lautstärke in Dezibel (dB) ist

Los aires acondicionados generan ruido debido a su sistema de ventilación.
El nivel sonoro, expresado en decibelios (dB), también aparece en la etiqueta energética:

  • Menos de 50 dB → muy silencioso

  • Entre 50 y 60 dB → audible, pero sin resultar molesto

  • Más de 60 dB → bastante ruidoso

También conviene verificar si el aparato tiene un modo noche, que reduce la velocidad del ventilador durante el descanso.

Consejos de uso

 

Los aires portátiles deben instalarse cerca de la ventana o puerta que se utilice para evacuar el aire, ya que el tubo no puede medir más de 3 metros.

Como la sensación térmica depende de cada persona, no es necesario bajar demasiado la temperatura para sentir frescor.
Una diferencia de 5°C entre el interior y el exterior es suficiente.
En ningún caso debe superarse una diferencia de 7°C, ya que podría causar resfriados o dolores de garganta.

Para soportar mejor el calor, es importante mantener una humedad ambiental entre el 40 % y el 60 %.
Esto es beneficioso para la salud, pero también para las plantas, los animales domésticos, los muebles e incluso los instrumentos musicales.

Mantenimiento

 

Los filtros deben limpiarse o cambiarse con regularidad, siguiendo las indicaciones del fabricante.

Cuando el aparato se enciende tras un largo periodo de inactividad, se recomienda hacer funcionar la ventilación sin enfriar durante una hora para eliminar la posible humedad.
Se aconseja repetir esta operación al final de la temporada.